La Federación Argentina de Carreras de Comunicación Social expresa su preocupación sobre actos lesivos de la libertad de expresión de acaecidos en los últimos días, algunos de los cuales incluyeron agresiones laborales, verbales y físicas a trabajadores de prensa, de diversos medios y a denuncias sobre las condiciones de trabajo de periodistas que se vienen dando en diferentes puntos del país.
Desde FADECCOS consideramos que la actividad periodística se debe desarrollar en un marco ético y de libertad que garantice el derecho a la información. Cada ataque directo o indirecto a las y los trabajadores de prensa repercute negativamente en la posibilidad de las y los ciudadanos de acceder a una gama de voces y perspectivas plurales y diversas que permitan robustecer el debate público. Es decir, impacta negativamente contra la calidad democrática de nuestro país.
Las lesiones individuales agravan la ya minada situación estructural de la profesión. Durante los últimos años se perdieron más de 4.500 puestos de trabajo de comunicadores/as a nivel nacional, un 66% de las y los trabajadores de prensa en relación de dependencia recibe salarios por debajo de la línea de pobreza, mientras que un 39% posee más de un trabajo. A ello se suma la flexibilización y polivalencia en las redacciones, horas extras no retribuidas y formas de contratación inestables que atentan contra la generación de un horizonte de posibilidad que favorezca la calidad informativa.
Sumado a esto, el contexto generado por el aislamiento social ha impactado fuertemente en las condiciones de trabajo, sobre todo en medios del interior, donde se está reclamando por la sobrecarga de trabajo, mejora de condiciones para quienes se desempeñan en zonas de circulación del virus, el trabajo sostenido con equipos y conectividad propia sin aportes de las empresas, aspectos que profundizan las condiciones de precarización.
La caída de los organismos de regulación en materia audiovisual creados por la Ley 26.522 yla aceleración del proceso de concentración del sector info-comunicacional han contribuido a generar un contexto de precariedad, y en estas circunstancias se vuelve indispensable fortalecer instancias como la Defensoría del Público y la gestión de los medios públicos desde una visión comprometida con la pluralidad de voces, articulando con instancias de formación de profesionales y con nuestras carreras.
La libertad de expresión constituye un derecho efectivo y colectivo. En ese sentido, cualquier acción u omisión que lo lesione impacta negativamente contra la calidad democrática de nuestro país. En ese marco, tal como lo viene haciendo desde hace años, FADECCOS insiste en el pedido a las autoridades ejecutivas, legislativas, empresas periodísticas, sindicatos, redes universitarias y organizaciones de la sociedad civil ligadas al sector, para construir de manera colectiva un marco regulatorio integral e inclusivo sobre comunicaciones convergentes,con perspectiva de género, que tenga como objetivo final revertir la situación descripta, y garantizar el derecho a la libertad de expresión de todos y todas.